Querían que su maestro fuese enterrado en el lugar en el que quería enseñar las palabras de Jesús, así que atracaron su barco en la tierra donde se acababa el mundo: en Finisterra.
Tras unos días caminando llegaron a un lugar llamado El Campo de las Estrellas, donde decidiendo enterrar a Santiago.
Pasaron muchos, muchos años hasta que un pastor llamado Pelayo encontró la tumba. Este hombre le dio la noticia al rey y al obispo, fueron inmediatamente al lugar de la tumba y reconocieron a Santiago.
Al rededor de donde estaba enterrado mandaron construir una capilla de piedra y barro. Con los años se fue mejorando, hasta convertirse en una gran catedral.
Además, el nombre de la ciudad cambió y pasó a llamarse Santiago de Compostela, que significa "Saniago de El Campo de las Estrellas", se convirtió en la capital de Galicia y muchas personas de todo el mundo viajan hasta esta ciudad para visitar la gran Catedral de Santiago de Compostela.
¿Lo habéis entendido todo?
Aquí os dejo un vídeo que explica muy bien la leyenda entera: